lunes, 17 de octubre de 2022

PRECAUCIONES CON LOS FRUTOS SILVESTRES

 

No todo es apetecible de la despensa  que nos brinda nuestros árboles y arbustos durante el Otoño. Con estas dos imágenes pertenecientes al libro La Naturaleza en las cuatro estaciones de Richard Adams, Ed. Teide (Barcelona1981)  prevenimos de las consecuencias que pueden presentar para nuestro cuerpo la ingesta de algunas bayas de nuestros bosques. Lo que es malo para los humanos, los animales, principalmente aves e insectos se nutren de ellas para su dieta alimentaria. Las que van señaladas con un circulo rojo en las  ilustraciones son perjudiciales para la salud humana. Por su color rojizo, resultan muy llamativas para las aves principalmente,  no renegando de ellas tampoco algún que otro mamífero.

Por otra parte, cuando encontramos en ocasiones ejemplares aislados en puntos inverosímiles del planeta de alguna especie que no corresponde geográficamente a su localización, bien sea un tejo, un espino blanco, un saúco, una zarzamora, por mencionar algunos ejemplos, debemos agradecer su ubicación a algún zorzal, cuervo, arrendajo, tordo o papamoscas que ha depositado sus excrementos contribuyendo a la diversificación de las especies.


¿A QUÉ HUELE EL OTOÑO?

Cambia mucho el panorama, de la observación, cuando llueve que cuando no diluvia. El frescor, la humedad, la  niebla son factores atmosféricos que pueden condicionar nuestro punto de vista. Con esta entrada os damos algunas pistas para refrescar vuestro disco duro particular durante la estación en la que nos encontramos. Si queremos diferenciar, lo que se puede encontrar en un boque mixto tipo de un entorno  cultivado por pinos. En este caso, en Euskadi muchos sois conocedores de la situación, la diferencia de lo que encontráis en uno con respecto al otro es notable



 Las ilustraciones se encuentran en el libro Guía del Naturalista de Gerald Durrell, Blume Ediciones (1983) . Por medio de ellas os orientamos de las bayas, insectos, hongos, líquenes, tipos de árboles y arbustos que habitan en ambos lugares.  
Sólo a ti compañer@ lector@ te corresponde averiguar su procedencia en tus salidas a la Naturaleza. Y de esta forma buscar tu fragancia, aroma y entorno con el que mejor te identifiques.