sábado, 25 de marzo de 2023

LAS PLANTAS MEDICINALES EN PRIMAVERA


Mucha precaución con lo que se cuenta en esta entrada. No es fácil identificarlas en su medio natural , ahora que nuestras mesetas, montes, valles, praderas, caminos y campos empiezan a poblarse de flores. Es cierto que las que se citan en estas imágenes procedentes del Libro  La vida de las plantas (19829 Ed. Mensajero, Bilbao  tienen ciertas propiedades que se deben conocer muy bien y como aplicarlas para que produzcan el efecto correspondiente.

No se trata de salir a esquilmar nuestros campos, en busca de la flor oportuna que pueda solucionar cierto síntoma. Con personas que conocen la etnobotánica, valiéndose de su experiencia y conocimiento te puedes acercar a esta disciplina que te gratificará tus inquietudes de conocer. Ahora que los prospectos de la industria farmacéutica están en el debate de incluirlos o no en los medicamentos, el origen de  muchas de sus propiedades, en pequeñas dosis provienen de nuestra floresta natural.


 

LA COMUNIDAD DEL BOSQUE



 









Las distintas tribus Arberas consensuamos hace ya unos años (14 Febrero de 2009) en los encuentros Cum Clavis una definición de bosque válida para defenderla ante todo tipo de profesionales. En estas dos páginas, del Libro Los árboles (1979) Plaza & Janes editores, Barcelona resume muy gráficamente nuestra definición. Señalando a los distintos actores que intervienen dentro del ecosistema bosque.

Nunca está de más recordarlo, para todos aquellos que vemos en el bosque algo más que un conjunto de árboles. Con biodiversidad vegetal y animal y otros valores que no se pueden cuantificar en términos económicos solamente.

NUESTROS ÁRBOLES MÁS GENEROSOS

En ocasiones no les apreciamos como se merecen. Recién iniciada la estación primaveral, muchos de ellos  muestran sus ramas repletas de flores con colores llamativos. Beneficio secundario para polinizadores que encuentran en la floresta un repleto atracón para saciar sus estómagos diminutos. 

Cerezos, almendros, endrinosnaranjos, manzanos y perales entre otros muestran sus mejores vestidos florales que contribuyen para que nos esforcemos a disfrutarlos con parte de nuestros cinco sentidos; vista y olor, principalmente. Cuando dispongan de sus frutos respectivos, daremos cuenta de los restantes

Estas láminas del Libro la vida de las plantas (1982) Ed. Mensajero, Bilbao nos sirven de ejemplo para apreciarlos con mas delicadeza.