Arropado por la antigua Ermita de Mirantes de Luna, este ejemplar de tejo sobrevive como otros cuantos adosado a un edificio religioso. Con la salvedad que la Ermita en la actualidad se encuentra abandonada y dedicada a cobijar ganado.
Su copa frondosa, sus ramas alargadas y extensas junto con sus raíces penetrantes le dotan de un vigor estoico. Luchando con el paso del tiempo y el clima de montaña que le azota.
Al fondo, por encima se su copa se divisa el sabinar de Mirantes de Luna un espacio privelegiado y protegido en la provincia de León.
1 comentario:
Qué bonito paisaje el del sabinar dominado por la ermita y el tejo!
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