El frío se apodera del paisaje. El manto blanco cubre las fértiles tierras, prados, y árboles de la vertiente cantábrico-atlántica. El largo e intenso invierno acarrea una enorme desventaja para los habitantes de nuestros bosques.
Las fuertes heladas de la estación invernal mantienen nuestro paisaje mas cercano anclado en la blancura y el silencio. Rodeado de esculturas artificiales de formas variopintas. En medio de este panorama, el acebo se erige en protagonista principal de nuestro bosque. Con su verde follaje y sus frutos rojizos de un intenso brillo, constituye el principal sustento de proteínas para la fauna de nuestro bosque. Pero, también podemos "emboscarnos" por sus superficie para reconocer, huellas de sus moradores, yemas en evolución de nuestros árboles y arbustos de hoja caduca y sonoros cantos de las aves que los atraviesan Un buen ejemplo lo encuentras en las ilustraciones inferiores de los libros editados por PESA denominados: Bosques y Árboles y hojas (Madrid, 1985).
Por último, el suplemento Magazine (28-11-18) recoge una serie de consejos muy útiles sobre las flores de invierno que podemos encontrarnos. Además, recoge una serie de tareas muy recomendable de llevar acabo durante esta estación para efectuarlas sobre nuestras plantas y árboles.
1 comentario:
Me ha encantado vuestro blog, lo unico que le he hecho en falta es que pongais que os pueda seguir por correo electronico cada vez que hagais una entrada nueva
Un saludo y enhorabuena
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