Las lluvias, el aire frío, la humedad durante este mes de marzo que finaliza hace que la cubierta vegetal de nuestra latitud se muestra todavía en reposo. Nuestros bosques de robles y hayas, con mucha paciencia, muestran sus brotes recientes. Abedulares y saucedas empiezan a renovarse, con nuevos brotes frondosos. Los más espabilados en las riberas de nuestros cauces son los avellanos y arces, que despiertan con fuerza de su etapa de letargo. Quizás, y así lo reflejamos en nuestro cuaderno de campo, los cerezos silvestres y espinos, destacan por su abundante floración blanca, así como un castaño, como se muestran en las imágenes inferiores
También hemos disfrutado de temperaturas elevadas, Calor al mediodía que propicia la aparición de flores pequeñas en los suelos de nuestros bosques, praderas y entornos urbanos. Una secuencia que os dejamos en las siguientes fotografías que acompañan este texto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario