El cautivo roble extiende sus brazos en busca de la energía. Savia nueva recorre sus ramas llenas de brotes jóvenes que adornarán su piel con la estación primaveral.
Arroyos, regatos y riachuelos fluyen en abundancia. Las lluvias de Febrero inundan los caudales alimentando las raices del bosque de galería.
Los cultivos forestales de pinos mudan su vestimenta invernal. Se despojan de frondosas mallas vegetales que adornan sus estilizada figura.
Dos caras de un mismo ecosistema:el ayer y el hoy, el ocre otoñal y el verde primaveral,la sombra de un incipiente presente de esplendor.
Prímulas vulgaris resurgen con vigor, anuncian la Primavera en nuestros entornos más cercanos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario