MEJORANDO EL OTOÑO

 ¿Cómo no salir, ahora mismo, a saborear tanta sabiduría? Rojos, ocres y verdes languidecen convirtiendo el paisaje en poesía visual.

Los bosques de hoja cadúca de toda España viran de color y ofrecen la que, muy posiblemente,sea su mejor estampa. Es el momento de echarse al monte y salir al encuentro de todo tipo de árboles para descubrir que juntos y agrupados son algo más que simples bosques

 Los árboles por esta epoca son muy generosos. Recordad que en la exposición que tenemos hay un apartado dedicado a estos y los frutos que producen.

A mediados de octubre, comienza el espectáculo. Cámara en mano la naturaleza nos brinda color por doquier.



 Es conveniente seleccionar nuestros  destinos que a partir de ahora se visten con sus mejores pijamas para anunciar la llegada del letargo invernal.



Como buen acariciador, octubre resulta tenaz, lento y leve. Se le puede considerar el mes más generoso del calendario. Da mucho: sacia la sed de los suelos; madura la cosecha de las encinas y robles.


 El arranque del otoño es uno de los mejores momentos para sentirse hijos de la atmósfera, de la transparencia, de la humedad que vuela. Nos lo permitirán las luces más limpias,por recién lavadas, del año

 

 Por supuesto, las nueces, que tanto nos apetece degustar, resisten aún estoicas en el colorido del árbol.

Tres tonalidades, tres colores diferentes, un único árbol, ¿quién lo diría?

 Las manos nos muestran las rayas de la vida que fluyen nuestro devenir. Las rayas de la hoja de este árbol muestra su decrecimiento, su futuro próximo cercano a su caída.

 Pero no todo es color en el otoño, también exiten ejemplares de arbustos que nos proporcionan alimento. Indispensables para las aves, y porque no , también para los Humanoides.

 Una misma hoja simplifica el decrecimiento sostenido  del otoño, la fogosidad del verde, la oscuridad del ocre y el resplandor tierno del amarillo.

 La rama caída del árbol nos transmite los tonos caracteristicos del otoño. Una rama que ejamplariza los árboles enigmáticos de nuestra Comunidad, aunque mucho otros asocien el cultivo forestal del pino como ejemplar dominante en nuestro territorio.

La madera muerta, fuente de vida para los pequeños microorganismos del bosque, se cubre de hojarasca y verdoso musgo.

Ya se acaba la brama pero empiezan otros amores. La impronta de la lucha fraticida queda aqui expuesta en la corteza de este arbusto.

La tierra mojada, al mismo tiempo, hace brotar el olor a humus. La fertilidad natural, de la que por cierto depende casi todo en este mundo, inicia lo mejor de su eterno ciclo.



 Las primeras castañas maduras y los miles de bellotas de robles, encinas y alcornoques que van cayendo al suelo, en todo o en parte maduras para contento de ciervos, corzos, conejos.

 En la variedad está el gusto, solemos repetir con frecuencia. Que mayor biodiversidad de hojas en este remolino de aire para identificar los árboles cercanos.Además de experimentar el chasquido característico al pisarlas.

 Octubre, en mucha mayor medida que cualquier otro momento del calendario,desata dos sentidos: el tacto y el olfato. Tocar, palpitar, aromatizar y oler ;campos y praderas, valles y montañas, parques y jardines que nos traducen la firma de la estación predominante.

 Las palomas, los gansos o las grullas sobrevuelan en este mes, con ese raro albedrío del que disfrutan los nómadas del viento. Por otra parte se equilibra de nuevo las horas de sol y de luna; despierta los amores de cabras, gamos, rebecos, muflones.

 Ya brincan los mil tonos posibles por entre las ramas. Octubre languidece, aprovecharlo solo depende de ti.