jueves, 23 de diciembre de 2010

SANTOÑA 18-12-2010

Diecisiete txirpialeros pudieron finalmente embarcarse en la Cantabria infinita por Santoña. Carlos Sainz fue nuestro extraordinario guía.

Mira un ganso, no, es un ánade silbón; mira allí un charrán patinegro;

¡Qué se tire, que se tire y se tiró!



Navegamos por la bahía de Laredo, la desembocadura del Asón y salimos a alta mar bordeando en Pico del Fraile del monte Buciero.


Hasta el faro del caballo

Unos caracolillos chinos y otros entremeses fueron el entrante de la comida de Escalante, aquí se nos sumaron, los asiduos a los eventos gastronómicos, en total 21.

Un paseo por playa Berria al anochecer,
fue la guinda de un día que prometía mal tiempo pero que se tornó extraordinario

lunes, 20 de diciembre de 2010

LA MAGIA DEL MUÉRDAGO

Fuentes : Mi blog mágico y suplemento Tierra 18/12/10





En los paseos por la naturaleza hay que mirar siempre hacia arriba de los árboles, donde el muérdago forma pequeñas o grandes matas en numerosas especies(abetos, olmos, manzanos, álamos, fresnos, robles), aunque se encuentra más extendido y más fácil de identificarlo en pinos (silvestre, negro, carrasco). Los bosques de las riberas de los ríos suelen ser los más apetecidos por el muérdago, pero no sólo se muestran en estos. Existen ciertos paisajes con muérdagos sobre los árboles en la Cordillera Cantábrica (Asturias, Cantabria y Burgos), el Valle de Alberche (Ávila, Madrid) y la Sierra de Albarracín (Teruel).
El muérdago, una planta que parasita en árboles y arbustos, tiene un tronco que se ramifica sucesivamente formando horcaduras, hojas coriáceas perennes y bayas blancas. La especie más conocida en el mundo de la magia es la que crece en los robles. Para ahuyentar las brujas y los malos espíritus, se cuelga la planta en el corral y en la casa. En toda Europa está extendida la creencia de que colocando ramitas de muérdago en el umbral de la puerta o debajo del tejado se repelen las malas influencias. Sobre todo en Francia e Inglaterra se considera que es una planta de la buena suerte, como indica el refrán inglés: "No mistletoe, no luck" (Sin rama de muérdago no hay suerte).
Lleva ya unos días luciendo unos frutos globosos inconfundibles, casi translúcidos, con un color entre blanco y verde tenue y no hay que encontrarlo creciendo directamente desde el suelo, sino formando matas en los alto de las ramas de los árboles. Por eso su condición de semiparásito, que no parásito total, ya que obtiene parte de sus sustento (agua y sales minerales) de la planta hospedante, pero no todo. Además, los zorzales y los mirlos dan buena cuenta de sus bayas blancas, en las estaciones frías, colaborando en la dispersión de sus semillas.




La creencia en el poder mágico del muérdago recuerda ideas similares de otras culturas, en las que también se consideraban mágicos los llamados epifitos, es decir, plantas que crecen sobre otras plantas. En Camboya se celebran ceremonias para descender una determinada especie de orquídea parásita del tamarindo, a la que también se atribuyen excelentes propiedades medicinales. El saúco que crece encima de otro árbol ya se empleaba en la Antigüedad contra las mordeduras de perros, y en el Renacimiento se creía que el saúco que crecía sobre un tilo era, igual que el muérdago, un remedio contra la epilepsia.
Hoy en día, el muérdago se emplea sobre todo en el tratamiento del cáncer, pues entre otras cosas alivia los efectos secundarios e incrementa de este modo la calidad de vida del paciente.
Recurriendo a la Historia, los celtas y los germanos tenían el muérdago en alta estima. En la mitología germánica es precisamente el muérdago, una planta más bien insignificante, el que mata al invencible favorito de los dioses, el antiguo dios de la luz, Baldur. En la Edad Media adquirió la fama de ahuyentar demonios y brujas. Así, reinaba la convicción de que con ayuda del muérdago era posible embelesar a una bruja que se había subido a un árbol para conjurar el mal tiempo. Para ello bastaba colocar las plantas alrededor del árbol y enseguida cambiaba la borrasca provocada por artes mágicas.
Quienes más veneraban el muérdago fueron los celtas, siempre que creciera en su árbol más sagrado, el roble. En general creían que el muérdago era un "curalotodo", y los celtas los bajaban de los árboles en días señalados después de una serie de preparativos rituales. También consideraban que si un muérdago no provenía de un roble, su efecto curativo era menos potente. Como ocurre con todas las plantas, su efecto medicinal se basaba en la analogía: se empleaba sobre todo contra el "mal caduco" (epilepsia), pues dado que el muérdago no cae del árbol, tampoco lo hará el paciente que lo lleva encima o lo toma una vez cocido. Se supone que ya el rey David había descubierto este efecto del muérdago.

Despúes de estas anécdotas y propiedades sobre esta planta, sólo queda hacer buen uso de ella, en el caso que sea necesario, pues cuentan, susurran, comentan que entre sus propiedades besarse bajo sus ramas garantiza el amor eterno.Ponerlo en práctica y lo experimentareis.

viernes, 17 de diciembre de 2010

EL ÁRBOL DE LAS PREPOSICIONES


Al concluir siempre un año, se tiende a realizar un análisis del mismo y fijarnos nuevos retos para el venidero. Desde esta reseña proponemos un reto a todos aquelllos que nos siguen. Que dejen un deseo para el próximo año acorde con la ideosincrasia de TXIRPIAL. Basta con que lo expreseis en el apartado de comentarios. La idea es conjugar las preposisiciones gramaticales con el objetivo expresado.Os dejo unos ejemplos para que os vayais sumando a esta inciativa:


Hasta cuando la hipocresía estará presente en nuestra sociedad.

Hacia donde camina la política forestal de nuestra Comunidad Autónoma.

Cabe alguna posibilidad de regenerar nuestros bosques y superficies verdes con plantas autóctonas, a partir de una fecha concreta.

martes, 14 de diciembre de 2010

PUERTAS ABIERTAS



El Monumento natural del Monte Santiago(Burgos) nos propició una jornada interesante de puertas abiertas. Traspasamos el umbral de esta puerta improvisada en el paisaje y nos adentramos en un mundo mágico. Donde la Naturaleza hace y deshace a su antojo, sin importarle la intervención humana.

Estas estratégicas piedras alineadas simetricamente, puestas quien sabe cuándo y por qué, encuandran una imagen sugerente para los transeuntes del frondoso hayedo. El verdor del musgo adherido le confieren una instantánea peculiar, apenas visible por los que caminan por la pista central.

Dando vueltas por el hayedo, encontramos esta otra imagen. ¿Uno o dos árboles? Caprichos naturales a los que no hay que darles más vueltas. La Naturaleza, por principio, es sabia.

Como ocurre en esta pequeña vaguada. Los brotes de haya jovenes tapizan con mucho encanto el rincón, garantizando la regenaración natural del bosque. Es en este momento cuando me viene a la memoria aquella frase:

"Que le dijo el bosque al ingeniero: no me toques que yo me regenero".


Aprovechando el tapiz natural del musgo, mostramos la verdadera esencia del hayedo: sus frutos, el hayuco. Perfectamente disiminados, separados, encontramos las semillas que en un futuro compondrán los tupidos bosques de nuestra tierra. Y que los plantabosques agradecemos permitiendonos recolectar unas cuantas para proseguir en nuestra ardua tarea.

Por último, para aquellos que aborrecen la estación invernal, es durante esta época cuando los árboles adoptan una forma rígida y estoica, comnvirtiéndose en verdaderas esculturas del paisaje. Mezclándose con la hojarasca,el musgo y el liquen, confiriendo otro aspecto a la Naturaleza.

viernes, 10 de diciembre de 2010

LA SILICONA AMENAZA AL BOSQUE

Fuente ilustración: joaquinaraujo.com
Fuente: Crónica Verde por Césa-Javier palacios, 9-12-10

Una buena cena entre amigos es siempre con un buen vino. Pero cada vez con más frecuencia, coges el sacacorchos para abrir la botella… y no hay corcho. En su lugar aparece un famélico tapón de silicona marrón con vetitas longitudinales pintadas. Te sientes estafado ante tan burda falsificación. ¿Quién ha cambiado el tapón?

Vino y corcho son inseparables desde que el monje Dom Perignon los uniera en los primeros champañas hace ahora cuatro siglos, aunque mucho tiempo antes romanos y fenicios ya utilizaban la esponjosa corteza del alcornoque para sellar sus ánforas. Hasta ahora.

Desde hace apenas una década el plástico está arrinconando al corcho. Dicen los defensores de estos nuevos cierres artificiales que así se evita el problema del acorchamiento, algo que tan sólo afecta a un 0,6% de los caldos y que también se produce con los sintéticos, pues en realidad es enmohecimiento. Sin embargo, el cambio resulta mucho más grave y dramático. La silicona está haciendo caer el consumo mundial de corcho, poniendo en peligro a los alcornocales, uno de los bosques con mayor biodiversidad del mundo, refugio de águilas imperiales y linces. Sustento de 100.000 trabajadores del igualmente muy amenazado mundo rural, quienes utilizando viejas técnicas artesanales producen 12.000 millones de tapones al año, la mitad en Portugal y un tercio en España.

Volvamos a la cena y a la botella. En la contraetiqueta aparece claramente la denominación de origen, el método de crianza, una pequeña ficha de cata y hasta la advertencia del uso de sulfitos. Pero en ningún lado se dice que el tapón sea de corcho, que con su uso protegemos el bosque, a sus gentes y a sus animales.

No sé vosotros, pero yo el próximo día en que me abran una botella con el tapón de silicona se la devuelvo al camarero. Si el tapón no es de corcho el vino no puede ser bueno. Ni ecológicamente admisible.

miércoles, 8 de diciembre de 2010

GIACOTXEMI EN LA COTORRA

Y llegaron al fin las primeras nevadas y con ella miles de aves invernantes, milanos reales, pinzones, zorzales alirrojos,...; pero no sé si os habéis dado cuenta, este año aún muchos árboles conservan sus hojas: robles, fresnos,..., pese al frío y el viento sur, las hojas todavía no se han caído a esta alturas de diciembre y es que en realidad, todavía no ha habido más que tres o cuatro heladas.

domingo, 28 de noviembre de 2010

2011, AÑO INTERNACIONAL DE LOS BOSQUES

FUENTE: Eroski Consumer 24-11-10 por Alex Fernández Mueza
El Año Internacional de los Bosques pretende llamar la atención de todos los ciudadanos del mundo durante 2011. Su objetivo es aumentar los esfuerzos de recuperación y conservación de las masas arbóreas mundiales y recordar que son parte esencial del desarrollo sostenible del planeta, gracias a los beneficios económicos, socioculturales y ambientales que proporcionan.

Sus responsables realizarán a lo largo de todo el año diversas actividades para implicar a instituciones, empresas y ciudadanos y llamar la atención sobre las mayores amenazas que sufren los recursos forestales. Se promoverán iniciativas para aumentar la ordenación sostenible, la conservación y el desarrollo de todo tipo de bosques, incluidos los árboles fuera de ellos. Además, se intercambiarán conocimientos sobre estrategias que han frenado la deforestación y la degradación forestal.

Con esta edición, será ya la segunda que los bosques son protagonistas de un Año Internacional: en 1985 el Consejo de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) pidió a sus Estados Miembros que tomaran conciencia de la necesidad de proteger esta parte esencial de la naturaleza.

Por qué hay que proteger los bosques

Según estimaciones de la FAO, cada año desaparecen más de 13 millones de hectáreas de bosques en todo el mundo, una superficie equivalente a la cuarta parte de la península Ibérica. Los expertos señalan diversas causas, todas ellas provocadas por los seres humanos: la sobreexplotación y la tala ilegal, la conversión a tierras agrícolas y ganaderas, la recolección insostenible de la madera, la gestión inadecuada de la tierra, la creación de asentamientos humanos, las explotaciones mineras y petrolíferas, la construcción de embalses y carreteras, las especies invasoras, los incendios forestales, los cultivos para agrocombustibles, la fragmentación de los ecosistemas o la contaminación atmosférica.
Mención aparte merecen los bosques vírgenes conservados en su estado original, que desaparecen a gran velocidad en todo el mundo. Conocidos como bosques primarios, cubren un 10% de la superficie terrestre, aunque se estima que cada año se pierden o modifican unos seis millones de hectáreas. La organización ecologista Greenpeace asegura que solo se conservan el 20% de los bosques primarios originarios, que el 80% ya se ha destruido o alterado y que el 20% restante está en peligro. Por su parte, los árboles singulares, algunos con más de mil años de edad o del tamaño de un rascacielos, tampoco disfrutan de una mejor situación.

En España, la mitad de la superficie forestal está desarbolada y la actividad humana amenaza la calidad biológica de los bosques que perviven. Así lo señala el informe "Los bosques que nos quedan. Propuestas para su restauración", elaborado por expertos de la organización conservacionista WWF y de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM).

miércoles, 24 de noviembre de 2010

PROPUESTAS PARA EL CALENDARIO DEL AÑO 2011

"Cada tiempo precisa de sus héroes" Espronceda
El martes 30 de Noviembre, los y las interesadas en realizar actividades dentro de los parámetros que contempla TXIRPIAL, deben acudir a la reunión semanal con dos propuestas de iniciativas para desarrollar el año entrante. Así se acordó en reuniones precedentes, con la idea de esbozar un calendario más o menos sustancioso. Se aconseja puntualidad, dentro de lo posible, para no repetir y reiterar las ideas.
Confiamos en que no se produzca la escena que recoge la instantánea que acompaña este texto.

lunes, 22 de noviembre de 2010

LA ANESTESIA ES EL OLVIDO

Por estas fechas y desde hace ya unos años, venimos celebrando todos los otoños el día de los bosques autóctonos, 23 de Noviembre concretamente.
Instituido por ARBA la vieja ha sido posteriormente adoptado por otras asociaciones naturalísticas y ecologístas como símbolo conjunto y complejo, capaz de englobar varios ideales.
La fecha se elige principalmente porque señala el inicio de la temporada real de plantaciones de árboles, temporada que, según los años, puede haber empezado 15 ó 20 días antes y que llegará hasta el mes de marzo, momento que nunca se debería superar, así que con esta fecha también se pretende enseñar que no es la primavera la mejor época para la plantación de árboles, como piensa una gran parte de la población.
Para conmemorar esta efeméride combinamos poesía e imagen, solapando el HIMNO AL ÁRBOL de Gabriela Mistral con el clic, clic, clic fotográfico de los txirpiales y su cita anual en el Parque de Dª Casilda en Bilbao.



Árbol hermano, que clavado
por garfios pardos en el suelo,
la clara frente has elevado
en una intensa sed de cielo;

hazme piadoso hacia la escoria
de cuyos limos me mantengo,
sin que se duerma la memoria
del país azul de donde vengo.

Árbol que anuncias al viandante
la suavidad de tu presencia
con tu amplia sombra refrescante
y con el nimbo de tu esencia:

haz que revele mi presencia,
en las praderas de la vida,
mi suave y cálida influencia
de criatura bendecida.



Árbol diez veces productor:
el de la poma sonrosada,
el del madero constructor,
el de la brisa perfumada,
el del follaje amparador;

el de las gomas suavizantes
y las resinas milagrosas,
pleno de brazos agobiantes
y de gargantas melodiosas:

hazme en el dar un opulento
¡para igualarte en lo fecundo,
el corazón y el pensamiento
se me hagan vastos como el mundo!


Y todas las actividades
no lleguen nunca a fatigarme:
¡las magnas prodigalidades
salgan de mí sin agotarme!

Árbol donde es tan sosegada
la pulsación del existir,
y ves mis fuerzas la agitada
fiebre del mundo consumir:

hazme sereno, hazme sereno,
de la viril serenidad
que dio a los mármoles helenos
su soplo de divinidad.



Árbol que no eres otra cosa
que dulce entraña de mujer,
pues cada rama mece airosa
en cada leve nido un ser:

dame un follaje vasto y denso,
tanto como han de precisar
los que en el bosque humano, inmenso,
rama no hallaron para hogar.

Árbol que donde quiera aliente
tu cuerpo lleno de vigor,
levantarás eternamente
el mismo gesto amparador:

haz que a través de todo estado
¿niñez, vejez, placer, dolor?
levante mi alma un invariado
y universal gesto de amor.

P.D. ¿Pór qué debemos recordarlo todos los años esta celebración? Porque aquellos que se vacunan contra todo tipo de epidemias, víricas y sociales, se olvidan que su anestesia no es eficaz en este caso.

martes, 16 de noviembre de 2010

VISITA A LA EXPOSICIÓN DE LAZKANO


El martes 23 de Noviembre hemos quedado a las 18.00 horas en la entrada principal del Museo de Bellas Artes en Bilbao para acudir a la visita guiada de la exposición. Los interesados en acudir presentaros a esa hora en el vestíbulo del Museo. RECORDAMOS QUE ES SÓLO PARA LOS QUE ESTÁN APUNTADOS EN LA LISTA DE 15 PERSONAS acordada con los representantes del museo.Puntualidad británica, por favor.

DÍA DE LOS BOSQUES AUTÓCTONOS





La asociación de Educación Ambiental y Guías de la Naturaleza denominada TXIRPIAL organiza un año más la conmemoración del Día de los Bosques autóctonos EL DOMINGO 21 DE NOVIEMBRE. Se trata de la undécima edición consecutiva en que este colectivo viene desarrollando esta celebración que consiste en realizar visitas guiadas por el parque de Doña Casilda en Bilbao para conocer las distintas especies de árboles que lo componen. A partir de las 10.30 de la mañana y hasta las 14.00 horas aproximadamente cada persona que se acerque al puesto que la organización instala en las proximidades de la heladería será obsequiada con un ejemplar de planta autóctona.
Para poder conseguir este regalo gratuito los interesados deben completar la visita guiada por una serie de ejemplares de árboles y arbustos ubicados en el recinto del parque. Un representante de la asociación se encargará de contar las peculiaridades de los mismos y resolver las dudas de los visitantes.
Se trata de una campaña que busca concienciar a los interesados sobre la importancia de los bosques frente a los cultivos forestales. Bajo el lema UN BOSQUE NO ES UN CULTIVO los diferentes grupos de ARBA (asociación para la recuperación del bosque autóctono) salen a la calle en esta fecha en distintas localidades del Estado para realizar distintas actividades para reivindicar las especies autóctonas frente al uso indiscriminado de plantas alóctonas que conquistan el terreno alterando la biodiversidad de especies.

jueves, 11 de noviembre de 2010

SENDA DE BUSTALVEINTE EN LOS COLLADOS DEL ASÓN




Volvemos al Parque Natural de los Collados del Asón para realizar una de las rutas guiadas que ofrece el Parque y que nos permite recorrer en buena medida el más destacado glaciar del Alto Asón y como complemento se atraviesa una importante zona arbolada, el hayedo del Monte Llusías.Para ello partimos del aparcamiento de los Collados del Asón donde la primera parte del recorrido es una pista ganadera que gana lentamente altura hasta el alto de la Posadía, la niebla con la que empieza el día no nos permite disfrutar del paisaje en su plenitud. Dicho alto es una morrena frontal de alguna de las pulsaciones frías de retroceso que cierra un poljé, formación glacio-kárstica formada por varios sumideros y canales que llevan el agua hacia su destino subterráneo. Atravesamos la depresión o Poljé de Brenavinto con sus prados encharcados y cabañas ganaderas, donde a su izquierda un amplio rodal de abedules en disposición lineal contrastan por su color otoñal con las hayas que suben por la ladera.



Aquí en el Alto Asón los abedules que están en las bordes de los hayedos ayudan a este a expandirse preparando el terreno y antes que él se encargan los brezos y las retamas, ahora que la carga ganadera que ha soportado este entorno se ha reducido considerablemente. Antes de penetrar en el bosque del Monte Llusías hay que atravesar un segundo poljé, Brenarromán, en cuyo entorno hay algunas cabañas de uso ganadero.El Monte Llusías es una de las manchas forestales del parque que se salvo del hacha durante la fiebre deforestadora del siglo dieciocho a favor de los Astilleros debido a las dificultades de acceso.


Este bonito hayedo con una línea de abedules en su parte inferior tiene también manchas de acebos y tejos, unos cuantos de estos se ven en la siguiente foto, donde la guía con su explicación didáctica nos señala la importancia de los bosques en la generación de suelo, (gracias Tania).



Atravesando el bosque llegamos a las cabañas de Bustalveinte, prados de verano donde su arquitectura es muy parecida a la que se puede ver en los valles Pasiegos del entorno




con su cabaña de tejado de lajas, su puerta inferior para el ganado, la superior para pajar y vivienda de las personas y el cercado con muros de piedra de los pastos.
Después del necesario y deseado avituallamiento acompañado de un agradecido buen tiempo realizamos el regreso esta vez por el sendero del Valle, recorriendo el camino que en su momento llevaba el glaciar de Bustalveinte.



Al llegar al alto de Brenalengua disfrutamos del paisaje que la niebla matutina nos impidió y en su parte inferior derecha se ve el poljé frecuentemente inundado de Brenarromán.



Ya de vuelta Brenavinto desde el Alto de la Posadía.


Seguimos de regreso disfrutando de los pastizales con sus cabañas ganaderas
Llegamos al final de la etapa pudiendo ver la carretera de los Collados que atraviesa los restos de la morrena frontal del glaciar de Bustalveinte-Hondojón.
Después de visitar el centro de interpretación del Parque situado en el cercano pueblo de La Gandara nos toca volver no sin antes sacar una foto con las últimas luces del día del monumento natural más conocido del Parque, la cascada del Asón.



En recuerdo de la primera excursión que realice con Txirpial ya hace ocho años y donde conocí a algunos de los que todavía siguen por ahí.

domingo, 7 de noviembre de 2010

LA POESÍA VISUAL DEL OTOÑO


El color verde va desapareciendo gradualmente y otros pigmentos toman el relevo gracias a los azúcares y otros metabolitos atrapados en las hojas. El ginkgo (Ginkgo biloba) es un mágnífico ejemplo de este proceso, ya que sus hojas adquieren una bella tonalidad dorada gracias al ácido 6-hydroxy-kinurénico que refuerza la coloración de los carotenoides. (López Sáez, José Antonio, pags. 32-38, Quercus 296, Oct. 2010).



Cualquier rincón de cualquier parque de una ciudad compone una bella estampa otoñal, despertando nuestros sentidos en busca de una instantánea oportuna.




Unas 290 especies de 70 géneros botánicos adoptan tonos rojos en otoño, mientras 378 de 97 géneros se tiñen de amarillo. Aún así, resulta sorprendente que la mayoría de las especies no cambien de color en otoño.(op.cit.Quercus 296).



Al rojo viran los árboles del género Liquidambar, asi como la vid, numerosos arces y abundantes rosáceas. (op.cit, Quercus 296).


En definitiva, los cambios de color que ocurren durante la senescencia foliar están relacionados con la movilización de nutrientes y sus reabsorción por las células de las hojas, normalmente bajo situaciones de estrés biótico y abiótico. En cualquier caso, senescencia y abscisión (caída de la hoja) son adaptaciones de los árboles frente a días más cortos y temperaturas más bajas, cuando el coste de mantener las hojas es mucho mayor que el beneficio que pueda reportar la fotosíntesis.(op. cit, Quercus 296).

Tres elementos imprecindibles de nuestros bosques durante la estación otoñal: la agalla, la bellota y la hoja marron del roble caído. Si recolectamos cientos de miles de bellotas como la de la imagen, podemos ir repoblando nuestros bosques autóctonos de especies adecuadas a nuestra latitud. Los plantabosques no cesamos en ese cometido.



Observamos este pequeño bosque teñido por un arco iris de colores con distintas especies de árboles. La estampa otoñal podía haber sido capturada en cualquier bosque caducifolio de nuestra región atlántica, sin embargo, es claramente perceptible desde la Universidad de Deusto.
La explicación usual ha sido considerar que los tonos otoñales son consecuencia de la propia senescencia de las hojas , es decir, un carácter secundario que en ninguna manera es adaptativo. No obstante, este punto de vista ignora dos hechos fundamentales. En primer lugar, la caída de las hojas no está relacionada con las tonalidades llamativas. De hecho muchos árboles mantienen sus tonos verdes o apenas adoptan el marrón típico de la muerte celular, e incluso entre individuos de una misma especie algunos colorean sus hojas y otros no. Abscisión y senescencia podrían ser preadaptaciones al fenómeno del colorido otoñal, pero no son la misma cosa. Y, en segundo lugar, los tonos coloreados no son el efecto de la degradación de la clorofila, sino que proceden de nuevos pigmentos sintetizados en otoño, lo que implica un coste energético y no pueden por tanto ser un efecto secundario de la senescencia.(op. cit. Quercus 296).



Adaptar una tonalidad llamativa en otoño tuvo que responder a una ventaja adaptativa en los vegetales o, de lo contrario, no habría perdido su tiempo evolutivo en un esfuerzo tan peculiar.(op. cit. Quercus 296).


La perspectiva de la toma, adaptando el rol de una hoja caída encuentra una composición distinta contrastando con el verde del follaje del fondo, es lo que tiene el otoño.



Los árboles son muy generosos con aquellos que los respetan y los cuidan. Es época de recolectar los frutos que estos nos obsequian como el de la imagen, la castaña desprendida del erizo que la resguarda y cobija.



Durante el otoño, el color rojo está presente en casi un 10% de los árboles caducifolios de las regiones templadas, mientras que el amarillo domina en el 15%. El roble americano (Quercus rubra) elige el rojo, mientras que otros muchos congéneres europeos (Q. pyrenaica, Q. robur) se inclinan por el amarillo. (op. cit, Quercus 296).